Soy consciente de lo cansino que puedo llegar a ser pero es que con la 348 estoy que no micciono.
El sábado tuve la suerte de compartir unas horas con Julián, Carlos y Germán que fueron de lo más agradable por tres razones:
1.-Estupenda compañía
2.-Sesión de taller, es decir, sigo con mi F.P. particular.
3.-Paseo por el campo con las motos que, sorprendentemente, también sirven para montar en ellas.
Germán vino con dos motos. Una 247 preciosa pero con problemas de ajuste que hacen que no vaya como debe. Después de cambiar el retén del cigüeñal por el lado del encendido y de ajustar el avance, sigue mal por lo que tocará operar a corazón abierto. La otra es una 348 segunda serie, tan bonita o más que la primera y que esta sí, iba realmente bien. Como Germán cuida mucho el aspecto estético, me vino muy bien para comparar su moto con la mía y ver qué tenía que cambiarle para dejarla original, que es como me gustan.
Unas fotos de las dos juntas:
A la izquierda la de Germán |
A primera vista, hay cambiar el faro, acelerador, manillar, puños y poner manetas negras con sus guardapolvos. Posiblemente deje el manillar de momento. Por cierto, si alguien sabe cómo conseguir el guardapolvos del acelerador, ruego me lo haga saber. En esta foto se ve mejor cómo deben ser los elementos a cambiar:
Original como ella sola. Sólo falta tener subido a Rathmell. |
El cuentakilómetros con su soporte y su correspondiente cable de reenvío también tienen que ser instalados. Estos son los elementos originales:
Cuentakilómetros, soporte y cable de reenvío originales |
Otra de las cosas que tendré que ponerle son los adhesivos que le dan ese toque especial. Estos son los que debe llevar:
No falta detalle |
Como no hay nada peor que un friki cabezota, también busco algo que Germán oculta debajo del asiento y que, aunque no se vea, debe estar en su sitio. En la foto se ve a lo que me refiero:
Si no fuera porque es un gran tipo, le odiaría por ésto |
Efectivamente, la caja de herramientas con su trapo original y todo. Una vergüenza. Lo peor fue su cara de disfrute mientras me lo enseñaba.
Un detalle que no puedo dejar de señalar es el magnífico trabajo realizado en las botellas de la moto que como sabéis, vinieron pintadas de negro, lo que queda horroroso y ahora incluso anacrónico dado que las góticas nos han dejado. No voy a decir que lo hice yo porque pecaría de inmodestia :-))).
Aprovechando que desmontábamos la horquilla, Julián le cambió los retenes mientras servidor decapaba. Ya dice él que debo dedicarme a trabajos de valor añadido, lo que traducido significa que esté donde no pueda romper nada :-)) La verdad es que quedaron mejor que nuevas:
Trabajo profesional |
Después del atracón de 348, salimos a montar un rato con las 348, la 349/4 y la Enduro 250 de Julián. Esta última, es preciosa.
Un vídeo donde se ve lo bien que va la 348 aunque habrá que cambiar el condensador porque en caliente sólo arranca empujando. Aprovecharemos para experimentar con algo "nuevo". Ya publicaremos el resultado.
Como ya empezaba a sentirse un vacío en el estómago y siguiendo la moda, paramos en una gasolinera. Mientras comíamos, dos guardias civiles de tráfico decidieron lo mismo (o escoltaban a alguien, quién sabe) y se encontraron con esta imagen:
No matrículas, no papeles, no ná |
Se tiraron un buen rato mirándolas y comentando algo entre ellos antes de entrar. Mi teoría era que estaban decidiendo cuántas recetas nos iban a extender. Julián decía que como son tan moteros o más que nosotros, estaban simplemente disfrutando del espectáculo. Afortunadamente, tenía razón él porque no nos dijeron nada. Lo cierto es que el espectáculo era como para disfrutarlo. Porque son bonitas como ellas solas.
Una vez se hubieron ido, hicimos lo mismo por si se arrepentían y decidían volver. Antes una foto de los susodichos:
Germán, Julián y Carlos |
Según vaya cerrando el círculo con la 348, iré dando la murga.
Abrazos.